Nueve de los 10 jóvenes que viven en la UE se consideraron en buenas o muy buenas condiciones en 2024.
Según Eurostat, la cifra cayó ligeramente en el bloque de 27 personas, por debajo del 92% en 2010 a 90.1% en 2024.
Los jóvenes de 16 a 29 años vivían en Suecia, Finlandia y Dinamarca.
En contraste, los jóvenes rumanos son mucho más saludables. Un enorme 98.2% de las personas que viven aquí entre las edades de 16 y 29 años sienten que están en buena o muy buena forma, con Grecia en 97.7% y Croacia a 96.2%.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la salud como «un estado de bienestar físico, mental y social completo, no solo una falta de enfermedad o fragilidad».
¿Qué factores influyen en cómo las personas ven su salud?
Las percepciones de la felicidad de la UE entre los individuos pueden estar influenciadas por los estándares generales de salud en todo el bloque, así como las diferencias sociales y culturales.
Sin embargo, los ingresos más altos se relacionan principalmente con mejores percepciones de la salud.
En la UE, el 86.7% de los jóvenes en el grupo de ingresos más bajos los reconocieron como saludables en 2024, en comparación con el 94.0% en el grupo más rico.
La diferencia más importante en la proporción de jóvenes que informaron una salud muy buena o buena entre los ingresos más altos o más bajos de los Países Bajos se registró a un margen de 22.9%, seguido de Finlandia, con una brecha del 16,9%e Irlanda al 10,6%.
Mientras tanto, la diferencia más baja se observó en Eslovaquia, con una brecha de puntos porcentual de 0.3, Chipre (0.5%), Malta y Grecia (todos 0.8%).
¿Qué tan comunes son los problemas de salud a largo plazo en los jóvenes?
Los problemas de salud crónicos como el cáncer, el accidente cerebrovascular y la diabetes afectan al 16.3% de los jóvenes de la UE.
Según la OMS, los problemas de salud de larga data son una causa importante de mortalidad y discapacidad en todo el mundo.
Es más probable que las mujeres jóvenes enfrenten estos problemas que los hombres, con 22 países de la UE que muestran este patrón.
La brecha es la más severa en Finlandia. Aquí, las mujeres tienen casi un 11% más de probabilidades de informar problemas de salud a largo plazo que los hombres.
Esta situación también es una preocupación en Dinamarca, y la brecha es 7.1% y Suecia en 6.8%.


